domingo, 23 de marzo de 2014

Es por el miedo a lo desconocido.

Es el miedo lo que nos paraliza. El miedo a morir, al dolor, a que nos abandonen, al sufrimiento, a la vergüenza. Tenemos miedo a muchas cosas, pero nada es comparable con el miedo a lo desconocido. ¿Por qué la gente teme más el primer tatuaje que el segundo? El dolor es el mismo, pero la primera vez no sabes como será. ¿Miedo a la muerte? Más bien miedo a lo que viene después.
Este miedo a lo desconocido nos ha hecho inventarnos cientos de teorías: Dios, la reencarnación, el Paraiso..hasta el que nos quedamos descomponiéndonos bajo tierra es una idea de la que intentamos convencernos para no tener que pensar en que hay después, porque no hay forma de saberlo.
A veces, intentamos evitarlo. Preguntamos sobre lo que se siente al hacer esto o aquello, intentamos no coger cariño muy rápido a la gente, y nos inventamos mil vidas aparte de la de verdad, la cual intentamos alargar hasta el infinito a base de operaciones y medicinas solo para no tener que enfrentarnos al vacío.

Pero al final, da igual quien hayas sido. Da igual si has vivido veinte o ciento diez años, o si has hecho más de mil películas y serás recordado por décadas. Tarde o temprano, tu nombre se olvida, desapareces, y tienes que enfrentarte a lo que siempre has temido. Y no hay nadie a quien puedas preguntar sobre como es la vida después de que el corazón se pare.

No hay comentarios:

Publicar un comentario